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El hambre del porqué

A lo largo de las entradas de este blog, se nos pedía hablar de temas muy diversos, desde temas concretos (aunque amplios) como el poder de la palabra, o la llamada “sociedad del espectáculo”, hasta algo llamado “temática libre”, que es aun más difícil de acotar. Sin embargo, para esta última entrada, Antonio nos pidió que condenseráramos en 500 palabras en que había consistido estos meses de la asignatura. Tarea imposible por mi parte (con lo que esta será mi última y peor entrada), por lo que lo resumiré en un único concepto: el hambre.

Dejemos claro que no hablamos de la gula, ni ninguna otra necesidad física. Hablamos del hambre de conocer, de definir, de descubrir, de buscar y de encontrar respuestas. El hambre de conocer lo que ya conocíamos desde otros ojos que no fueran los nuestros, como conocer porque la sociedad se estructura como lo hace. De definir conceptos como el arte o la belleza, y descubrir que no es posible definirlo. El hambre de buscar, el de buscar como entender los textos propuestos para la asignatura. Y todo esto hacerlo juntos, en una pequeña (e incomoda) aula de universidad, todos los alumnos de la asignatura, debatíamos y encontrábamos respuestas. Porque teníamos hambre.


* Como única crítica a la asignatura, señalar que se ha tratado quizás poco la cinematografía, el arte que nos es más cercano a nosotros, así como video-arte. Fotograma de Raging Bull (1980) de Marin Scorsese.

Teníamos hambre de saber el porque de las cosas, de entender porque algún artista llegaría hacer algo que sobrepasa limites de lo normal, como enlatar sus propias heces, o poner un retrete en una exposición de arte, y que este retrete llegará a costar cifras inalcanzables para cualquiera de nosotros. Teníamos hambre por hacer Kahoots, un divertido test que empezó el primer día con miedo y temor por parte de todos, pero al término del semestre, era una de las fechas esperadas por todos nosotros, porque te hubieras leído o no los textos, algo aprendías de esas preguntas.


Pero todo esto, aunque innato en todos nosotros, futuros generadores de contenido audiovisual, has sido gracias a esta asignatura. Ha despertado en muchos de nosotros (con la ayuda del docente) ese hambre por el porqué, por ver que dos más dos, no son siempre 4, o si lo son, depende desde donde lo mires. O ver más allá de cuadros de Kandinsky, de bandas sonoras como la de Twin Peaks... O entender porqué los grandes autores, artistas y directores de cine siguen creando obras, porque también tuvieron hambre, por crear lo que no se ha creado aún, o innovar lo ya construido.


*Siguiendo con la temática del hambre, tomo como ejemplo al director del film Her (2013), Spike Jonze, quién siendo un enamorado del videoclip y el cine como nosotros, ha desarrollado un estilo propio con tan solo videocámaras y mucha imaginación, consiguiendo crear verdaderas obras de arte.

De la asignatura me quedo con muchos conocimientos y anécdotas contadas en clase, como que gracias a mi primera entrada del blog, despertó en Antonio algo de curiosidad sobre el CGI y los VFX de grandes películas, que engañan a nuestras mentes en el cine, lo que me hizo pensar que no solo aprendemos nosotros, si no que los tutores también lo hacen, porqué (algunos) aun conservan ese hambre por saber el porqué. Y espero que a partir de esta última entrada podamos aprender mutuamente.


*Termino este blog con este pequeño gif, que ilustra bien lo que parecen los VFX (aunque sean algo ridículos) Espero que resulte tan curioso como me lo pareció a mi en su día.



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